S-pain

Desde el slogan “Spain is different” hasta nuestros días, vemos como recientemente a causa de la crisis se desprende la S y nos queda la pena o enfermedad.
Desde hace unos días participo en un debate online respondiendo a una pregunta, ¿Qué crees que debería cambiarse en el sector turístico y porque?
Este debate sucede en Linked-in esponsorizada por Tourism Revolution People
Bajo la tutela de Paula Martínez.
Ahí intente argumentar mi respuesta tajante de NADA, aunque me temo que con poco éxito en mi empeño de dar un toque diferencial y provocativo para generar debate.
Llevo algunos meses sin publicar por propia imposición y poner distancia para observar que está sucediendo, excepto estas breves incursiones en este debate para complacer a Paula, y apoyarla en su andadura en esta etapa nueva para ella dentro del proyecto de la empresa Mind Project.
He estado analizando el comportamiento de algunos de los que intervenimos en el sector, especialmente a los sensibilizados con las tecnologías, distribuidores, prescriptores, consultores, evangelizadores, agoreros, y a algún iluso como yo.
Se debate constantemente acerca del modelo, de la necesidad de innovar, de los nuevos conceptos descriptivos en el sector, se habla de turismo liquido, de experiencias y todos los adjetivos que gustéis añadir.
Dije NADA y lo mantengo, con una matización, Back To Basics.
Intentare argumentar, porque
Leo muchos comentarios denostando a los tour operadores, haciéndoles responsables de todos los males “al paredón con ellos”, con la “sana” intención de captar al cliente final directamente.
Me gustaría tranquilizarles y comunicarles que no es necesaria esta persecución, los TTOO se suicidaron hace tiempo ellos solitos, los que quedan, están resistiendo en un entorno muy cambiante con un modelo obsoleto, ellos lo saben, también saben que les queda muy poco a menos que reinventen su negocio.
En el caso de que su reinvención prosperara, ya me gustaría a mí ver a más de uno llamando puertas con aires de misericordia, mal que pese a muchos, ellos fueron los que levantaron este sector, muy distinto es que los de “aquí” no supieran gestionar las relaciones y los contratos con ellos, pasarles a ellos toda la responsabilidad, es de poco agradecidos por no utilizar un eufemismo más duro.
Mientras ocurre este episodio, vemos como el empresariado (compuesto mayoritariamente por hoteleros) empuja a los políticos a invertir mas y mas en la marca Spain, estos a cambio de no se sabe que, no dudan en gastar para una industria turística que tiene relevancia en función de si el día es o no soleado. Con la irrupción de las tecnologías y el declive del TTOO avanzan en sus demandas y solicitan que además se gestione desde patronatos, convention bureaus y demás instituciones, herramientas para la comercialización directa, es ahí donde los “politics” ven además de satisfacer a su clientela la posibilidad de generar recursos, (se me olvidaba apostillar que esta “fiesta” se nutre de dinero público exclusivamente).
Desaparecen los TTOO tradicionales y aparecen unos nuevos gestores, se les conoce por Online´s, el que guste comparar una empresa y otra vera cuales son las diferencias entre estas macro, meta buscadoras de producto. La “innovación” ha sustituido la forma pero no los fondos, los nuevos operadores disfrutan del mismo producto, el de los que se quejaban de que no controlaban la distribución de su producto en el mercado, tal vez ahora si lo hagan y yo no me he enterado.
Esta industria, es la única del estado Español a la que su total promoción corre a cargo del dinerito de todos los Españoles , (¿se imaginan a la industria del automóvil que viera sufragada toda su promoción por el papa estado?) con unos resultados más que discutibles, a modo de divertimento para los amantes del cálculo hagamos un ejercicio simplista, sumen todos los presupuestos del estado central, comunidades, patronatos provinciales, municipales y dividan la cifra por el número de turistas que dicen que nos visitan cada año, multiplíquenlo por cincuenta (años que más o menos este sector es una industria productiva), la cifra es desorbitante, lo más natural seria que cada uno de estos años se hubieran fidelizado un porcentaje de estos visitantes “satisfechos”, bien, si eso fuera cierto, con haber fidelizado el uno por ciento, la lista de espera para poder pasar unas vacaciones en Spain seria de tres años.
Con la penetración en el sector turístico del concepto 2.0 todo el protagonismo es para el cliente.
(Los últimos cuarenta y nueve años, parece ser que no tuvo protagonismo alguno)
No entrare a valorar a la cantidad de empresas o personas que están merodeando en los alrededores del sector (la presa) a ver qué tajada pueden sacar, debería hacernos reflexionar el propio mecanismo de la oferta y la demanda, si han surgido tantos en tan poco tiempo, es que hay clientes que están dispuestos a pagar por ello, algunos puede que tengan suerte y den con las soluciones adecuadas, otros serán victimas.
Me he puesto en los zapatos del cliente durante más de tres meses, llego a las conclusiones siguientes, en función de mis charlas con ellos.
1.- primero me interesa el precio.
2.-segundo me interesa el precio.
3.- tercero me interesa el precio.
Interrogados, por el destino, el servicio, etc.…
Me da igual es destino si el precio se ajusta a mis posibilidades.
El servicio es homogéneo (para bien y para mal) en toda la oferta mediterránea, ¿para qué perder el tiempo en leer los folletos y ver que me ofrecen?, siempre que sea a buen precio
Poner a caldo a los prestatarios suele tener recompensa y compran mi silencio, (no confundir con indemnizar por mala prestación), de ser así, tal vez repita, Spain is un chollo.
Este es el panorama a día de hoy, el empresario inmerso en la crisis (no propia del sector) pero es solidario y se la hace suya, decide pasar a la acción empujado por la situación.
Toma de decisiones:
El modelo ha cambiado y necesito sustituir a los TTOO.
Ante la falta de personal cualificado, me lo hago yo. (Con mis chavales y el apoyo externo).
Las versiones originales recomendadas por los expertos y más proyectadas son las siguientes:
Habla con el cliente, El cliente es tuyo, Todos para ti, El hombre que susurra al cliente.
Crece la preocupación por la imagen, la responsabilidad social corporativa y en las redes sociales.
(Esta última era de miedo)
Ante los políticos y el panorama que les ofrecen las crisis: industrial, construcción, automoción, soy su única esperanza.
(Ahí se crecen y ven una oportunidad para pedir, más y más, y mucho más).
Podría seguir, pero mi intención no es aburriros.
Conclusiones:
El día que se den cuenta los políticos que invierten mucho dinero en productos obsoletos, será demasiado tarde.
Si la política gestionase como una empresa privada, no gastarían un solo euro sin antes haber verificado que el producto tiene demanda y satisface las necesidades del consumidor. (Además es su obligación, verificar aquello que regula)
Los empresarios aun no han ajustado cuentas de a cuanto ascienda la factura de la “fiesta online”, tal vez veamos algunas vestiduras rasgadas muy pronto.
Esperemos que esta “fiesta” acabe en breve, una vez hayamos limpiado la sala, podremos hacer el balance exacto, solo con estos datos y no antes, sabremos qué futuro le espera a este sector.
Recomendaciones:
Volver a lo básico
Hacer las cosas bien.
Saludos cordiales desde la Costa Brava