Diálogo de besugos

Recién comenzamos la nueva temporada turística mientras otros andan con los preparativos para abrir sus establecimientos en breve.
Mi amigo (el hotelero) me llamo para quedar y tomarnos un café, no nos hemos visto en todo el invierno, y la verdad apetece tener una charla con alguien que detestas pero a la vez aprecias mucho, es una rara sensación sectorial que además creo que es reciproca.
Una vez saludados, hecha la “comanda” al camarero (esta vez estamos en zona neutral) repasamos de forma general y breve, temas de familia, política, futbol y previsiones para la temporada, me centrare en este último tramo de la conversación, ya que en el terreno deportivo estamos distantes él es Perico y yo soy culé.
Analizadas las previsiones que parece ser apuntan favorablemente, un gesto en su rostro da pistas para pensar que se equivoco en la estrategia (que bien queda esa palabreja) y ahora deberá asumir el resultado, ¿Qué ocurre, no va como esperabas? , no, si, si solo que he de reconocer que tal vez firme (firme es el equivalente de Vendí camas que ya no tenía) demasiadas camas en previsión de que la temporada seria floja y ahora…….. Ya (le digo) ahora con parar ventas, lo tenéis resuelto………. no empieces a tirarme puyas (me dice) si todos fueran tan intransigentes como tú o tan poco colaborativos seria mi ruina (vaya, no sabía que defender a mis clientes contra personajes como tú, ahora se le llame intransigencia) ya me entiendes…. (Dijo el)
Pero eso no es lo que más me preocupa, te acuerdas que año pasado hablábamos de las nuevas tecnologías, estos muchachos que van como motos con los artilugios, sí, claro que me acuerdo, que ocurre, ¿tienes problemas? No, problemas no, tengo un mar de dudas, este invierno he estado “haciendo números” y no me gusta el resultado…. No entiendo
Veras, comenzare por pedirte disculpas en la parte proporcional que a ti te afecta y por extensión a tu sector (receptivo) y lo hago en tono genérico, ya que si debiera hacerlo a niveles individuales, tal vez no sería necesario decirte nada de lo que te voy a contar. (Agradezco la deferencia)
A vosotros os tengo cerca, nos conocemos, tenemos días buenos, malos y terribles, pero somos amigos, podemos hablar, discutir y mandarnos a paseo, pero forma parte de nuestra relación de amor odio, de repente me he dado cuenta que a los nuevos, ni les conozco, ni sé donde están, ni tomo café con ellos, pero me succionan entre un 23 y un 28 por ciento de las reservas, (eso le duele) están enfadados conmigo por un tema que llaman “paridad” y lo que te contare ahora, déjalo en reservado ya que no tengo pruebas, discutí con un operador de estos y tal vez sea casualidad, después de la discusión a los pocos días los comentarios de los clientes en su espacio crecieron exponencialmente en sentido negativo….. no tengo manera de saber, si es casual o voluntario, antes cuando me ocurría algo con vosotros, una charla solucionaba la mayoría de problemas, me tiene preocupado, (se nota en sus gestos la preocupación) además como sabes el año pasado incorpore gente en lo que antes era el departamento de recepción, reservas, ahí en el despachito que he tenido que agrandar, ya tengo a cuatro personas trabajando , y no me preguntes qué coño hacen todo el día ahí metidos…..(no quiere ni saberlo) el que lleva esto, me pidió que contratara los servicios de una empresa para externalizar no se que de SEO y SEM porque ellos no daban abasto, en fin no sé que voy a hacer con toda esa panda, porque ahora además me encuentro que no se hablan con los de recepción, por problemas de solapamiento entre el jefe de recepción que defiende la relación con vosotros y los del despachito que defienden la relación con los operadores del mercado, pero las camas son las mismas y a veces tengo la sensación de que he desatado una guerra, donde no era necesario.
Pero, ¿porque me pides a mi disculpas? Me va a costar decirte lo que a continuación te diré, pero quiero hacerlo, ¿te mueres? Jajajaj, no hombre no, pero como me pongas más trabas no te cuento nada y nos vamos, cálmate hombre, anda, suéltalo ya….
Pues porque no os he tratado bien a lo largo de todos estos años, ahora al comparar como nos tratan los otros, te das cuenta que vosotros siempre estáis ahí y que si hay que arrimar el hombre, también lo hacéis aunque sea a regañadientes, estos nuevos a poco que se tense la cuerda, la amenaza está ya en los tribunales, con vosotros estaba en la barra o en el comedor.
Quiero estar al día con las tecnologías y las herramientas que me facilitan acercarme al cliente, pero no a este alto coste, vosotros jamás me habéis cobrado comisiones, eso sí a veces me habéis triturado los precios (no todos) ahí intenta quedar bien conmigo…..pero nada comparado con lo que he visto este invierno haciendo números.
¿Que harás? Probablemente nada, aunque me paso por la cabeza un pensamiento…. si invirtiera el dinero que dedico a las nuevas tecnologías en mejorar la calidad y los salarios del resto de los empleados, probablemente la rentabilidad seria mayor que la actual….
(No me lo puedo creer, haciendo cuatro números, da la impresión que ha hecho un máster en gestión), bueno, bueno, eso lo dices ahora porque estas con el calentón, en cuanto veas como entran a chorro las reservas del “Internete” se te olvida el enfado y seguiremos como siempre….
Pone cara de enfado, esta vez has de creerme, creo que ya va siendo hora de abandonar vicios y miedos del pasado y empezar a valorar a mi gente y tú también eres uno de mi gente (me abraza, yo sorprendido) y para relajarnos le digo que deje la medicación que toma ipso facto que no le sienta nada bien, le saco una suave sonrisa….
Terminamos de tomarnos el café, mira su reloj y cree que por hoy ya ha hablado bastante, le acompaño hasta la mitad de la calle, nos damos un abrazo y quedamos para los próximos días ya en su establecimiento...
He de reconocer que sus palabras me han dejado “Touche” no esperaba tanta sinceridad gratuita, (conociéndolo sé que no ha sido fácil para él) pero esta vez se notaba que salía del alma fruto de una reflexión, a lo que me llevo a un pensamiento que arrancaba una tenue sonrisa en mi tez, “que bonito seria que algún día el sector (receptivo) fuera reconocido públicamente de la forma que mi entrañable “besugo” acaba de hacer conmigo”, se que llegara este día y otros se sumaran aunque les cueste reconocerlo.
Un fuerte abrazo a todos desde la Costa brava deseándoos que la temporada aporte el caudal necesario para alcanzar los objetivos (los que lo tengan).